SALVIA

 

Salvia Lavandulifolia Vahl, Salvia Officinalis y otras salvias auctóctonas.

Esta hierba se toma mucho en infusión. Las hojas son buenas para la bronquitis y constipados, es antiespasmódica.

Se usa para el dolor menstrual, para regular el azúcar de la sangre, para los nervios, para la resaca, mejora la circulación y es vasodilatadora.

Las flores, en infusión, tienen efecto sedante, digestivo. También puede utilizarse para ataques reumáticos, como antigripal y febrífuga.

Cuando se consume cruda, mascada, sirve para limpiar los dientes, como desinfectante de las encías.

También es llamada Savia, Sélvia, Salvia de Aragó, Salvia de San Joan de Penyagolosa, Herba Salvia, etc (es muy popular).

En farmacia se usa como laxante suave y amargoaromática. Contiene aceite esencial con cineol, alcanfor borneol, ácido rosmarínico, picrosalvina y acetilicolina.

En mi casa, en verano, mis padres extraían del pozo (aljibe) un cubo de agua fresca y, en una jarra, mezclaban salvia fresca con el agua y nos la bebíamos. Estaba muy refrescante y sentaba muy bien al estómago.
Datos recogidos del Herbolario Digiral de Bañeres de Mariola

Mariano Agulló Sánchez