En Elche tenemos varios apodos de los que desconocemos su origen y su significado. Esto es lo que ocurre con el sobrenombre que tratamos en este artículo. Si decimos que vamos a hablar de don Antonio Martínez Maciá quizás pocas personas sepan de quien se trata, ahora bien, si le añadimos al nombre su apodo Pin, cualquier duda se disipa.

Como Pin se conoció a esta persona, que fue muy popular en Elche por la gran actividad que hacía como embajador de su pueblo allí donde se encontrara. Su inquietud le llevó a fundar y presidir diversas entidades que dinamizaron la vida cultural y social de la ciudad.

Así, en 1957 se creaba “La Peña Madridista Ilicitana”, de la que fue presidente durante muchos años don Antonio Martínez Pin, y que tanta influencia social tendría en la promoción exterior de la ciudad y sus símbolos, en especial la Dama d’Elx. “La Peña”, como es conocida, fue un verdadero oasis cultural en el desierto de la época. Por ella pasaron conferenciantes de toda España y del extranjero que realizaron charlas y coloquios de los temas más diversos; artistas con exposiciones de pintura, escultura y fotografía, todo ello siempre con gran éxito de público. También actuó como centro social, con su salón de baile, sala de lectura, sala de juegos de mesa, torneos de ajedrez y otras actividades.

Don Antonio Martínez Pin fue presidente de “La Orden de los Caballeros de la Dama de Elche” fundada el 4 de septiembre de 1968 por iniciativa de diversos colectivos de la sociedad ilicitana. Desde esta entidad se hace una labor importante al distinguir a personalidades y entidades de la vida pública, tanto de la ciudad como de fuera de ella y que hoy en día se ha ganado un prestigio que está fuera de toda duda.
También fue presidente de “La Asociación de ayuda contra el Cáncer”, organización no gubernamental que, con sus campañas divulgativas para prevenir la enfermedad y sus colectas con el fin de ayudar a los afectados, realiza una labor encomiable.
Como no podía ser de otra manera toda la trayectoria que realizó en vida tuvo su reconocimiento y el 29 de octubre de 2000 fue inaugurada, con la asistencia del alcalde, en aquel momento don Diego Macià Antón, y otras personalidades y amigos, una plaza en la calle Gabriel Miró y que a partir de entonces lleva su apodo. Una peana con su busto, hecha por el artista local don Miguel Ruiz Guerrero, recuerda para siempre a este hombre. En la ceremonia se dio lectura al acta en la que el Ayuntamiento en Pleno lo declaraba, unos días antes de este acto, como Hijo Predilecto y se entregó por el alcalde a la viuda el pergamino otorgado por el ayuntamiento donde así se hacia constar. En el mismo acto se descubrió la placa que da el nombre de Pin a la plaza.

J. Salvador Jordan