Tras
la procesión del Jueves Santo, los fieles que
masivamente acompañan al Santísimo Cristo
de Zalamea, amontonan todas sus velas cerca de la fachada
de la parroquia de San José y del Claustro contiguo.
Muchos
vecinos y amigos, además del Casal Jaume I, realizaron
quejas formales, por el riesgo de incendio que había
en la zona, debido a que esas manchas las había
producido el fuego. Además, se denunció
el posible deterioro de las pinturas murales que hay
en fachada sin proteger.
El
Ayuntamiento, pasados eso sí, unos días,
procedió a su limpieza, para evitar males mayores.
Lo
que está claro es que de cara a otros años,
se tiene que intentar evitar el amontonamiento de los
cirios usados cerca de una fachada que ya se quemó
hace unos años.