El
Martes Santo de 2008 se recordará en un tiempo.
Un 18 de marzo cargado de emociones y de sorpresas.
En
primer lugar, la Hermandad de la Oración en el
Calvario desfiló a ruedas. Durante toda la cuaresma
no se pudo recoger la cantidad necesaria de costaleros
y no hubo manera de poder salir a hombros.
La
Santa Mujer Verónica estrenó las terminaciones
de sus varales y realizó el encuentro emocionante
con la Caída de Nuestro Padre Jesús, que
volvió a impresionar en su subida de la cuesta
de Santa Ana. Un gran estreno aconteció en esta
Cofradía, con la Virgen del Rosario portada a
estilo granadino (por debajo a dos hombros) por sus
costaleras.
La
Sagrada Lanzada sigue engrandeciendo la Semana Santa
Ilicitana con la incorporación de otra impresionante
figura, San Juan Evangelista.
Pero
la sorpresa estaba por llegar. Sobre las 6 de la tarde
llegaba la noticia de que no iba a haber encuentro entre
Mater Desolata y el Cristo del Perdón. Llegadas
las 12 de la noche, se cumplió lo dicho, Mater
Desolata pasó por el cruce de Reina Victoria
y Marqués de Asprillas y realizó una reverencia
hacia el Cristo del Perdón, pero no hubo encuentro.
La noche finalizó con el indulto del preso en
Plaça de Baix.